En esta Iglesia ubicada en el Barrio de Cerbiago, nos encontramos con una excelente muestra de arquitectura clasicista y al su alrededor vemos casas de arquitectura algo más tardía, lo que nos hace pensar que fue una zona de esplendor durante los siglos XVII y XVIII, aunque en la edad media su importancia debía ser considerable.
Ya en el año 1084 aparece mencionada en algunos documentos. De su pasado medieval aún se conservan algunos muros góticos en el muro de lado del Evangelio. En el siglo XVII fue completamente renovada en estilo clasicista. En planta se desarrollan tres naves y una capilla mayor rectangular, cubiertas con bóvedas de arista, salvo el primer tramo ante la capilla mayor que presenta cúpula nervada. Las bóvedas se apoyan sobre pilares toscanos. Su parecido con Santa María de Ampuero lleva a atribuir su traza a Felipe de Alvarado. De su patrimonio mueble son de destacar el retablo mayor, fechado hacia el año 1680; los colaterales de la Virgen del Carmen y de La Inmaculada, de principios del XVIII.